Un amigo escritor me envió hace un tiempo esta apreciación de Hebe Uhart:
«No debemos engolosinarnos con las palabras, ni con los adjetivos redundantes, ni con las frases importantes. Al escribir no hay que quedarse en un concepto, hay que quedarse a unos pasos del concepto, un poco antes, sin llegar a él. Hay que darse tiempo y no cerrar. Ahí, en ese lugar antes del concepto, está la literatura, lo que nos hace ver, lo que abre ventanas. Ahí y no en la frase conclusa, inteligente, pedante. Hay que desconfiar de las frases hechas, de los lugares comunes y de los conceptos terminados.»
Desde entonces cada tanto recuerdo la apreciación de Uhart y pienso en este fragmento de la novela Siberia blues, de Néstor Sánchez: Sigue leyendo